El ataque cibernético que sufre PlayStation Network
hizo mostrar qué tan vulnerables son los procedimientos, protocolos y
mecanismos de seguridad informáticos que Sony implementó en su red de
usuarios de consolas. Esto a su vez, arrastra más consecuencias
negativas a su paso.

Una de ellas es la reputación. Con ese incidente, Sony ha sido afectada
en su imagen corporativa. ¿Qué confianza puede darle al consumidor una
compañía que no es capaz de proteger la información de sus clientes?
Seguro esta pregunta está resonando en la cabeza de muchos
cuentahabientes de PSN. La información privada de los clientes no es
sólo confidencial, es el activo más importante que una compañía puede
tener.

Después de detectado el ataque transcurrieron 6 días hasta que Sony
comunicó la gravedad del asunto, informando a los usuario de PSN que
algunas cuentas de PSN pudieron haber sido usurpadas obteniendo
información como el nombre, dirección, país, dirección de correo
electrónico, fecha de Nacimiento , ID de PSN y la contraseña de la
cuenta de los usuarios de la red. Potencialmente, todos los que sean
poseedores de una cuenta en PSN pudieron haber sido víctimas de robo de
su información privada. Con estos detalles, Sony quedó muy golpeada y
tendrá que hacer cosas excepcionales para desagraviarse con sus
consumidores.

Ponemon Institute, un instituto especializado en seguridad de datos,
hizo un análisis en el que calculó las pérdidas económicas que tendría
Sony por este catastrófico incidente. Sony podría perder un total de más
de 24.000 millones de dólares aproximadamente USD 318 por usuario.
Según aparece publicado en EveryEye.it, “Josh Shaul, jefe de la oficina
tecnológica de Application Security Inc. Ha declarado al portal web
Forbes que en pocas palabras, este podría ser uno de los ataques
informáticos más graves de los últimos años.”

Recordemos que no sólo PSN resultó afectada, sino también el servicio multimedia Qriocity